El neurointeriorismo es la fusión entre neurociencia y diseño de interiores. Su objetivo es crear ambientes que estimulen nuestros sentidos y mejoren el bienestar emocional y cognitivo. Al comprender cómo respondemos a la luz, el color, las formas y las texturas, podemos diseñar espacios que reduzcan el estrés, aumenten la productividad y fomenten la felicidad.
Luz y ritmo circadiano
La iluminación adecuada es fundamental para nuestro reloj interno. La luz natural ayuda a regular el sueño y la energía, mientras que una iluminación artificial bien graduada favorece la concentración y el descanso. Diseñar con ventanas amplias, usar cortinas translúcidas y elegir luminarias de temperatura cálida o fría según la actividad es clave para armonizar cuerpo y mente.
El poder del color
Los colores influyen en nuestras emociones y en la forma en que percibimos el espacio. Tonos cálidos como tierra y terracota aportan confort y conexión con la naturaleza, mientras que azules y verdes inspiran calma y serenidad. Seleccionar paletas que favorezcan la actividad que se realiza en cada habitación ayuda a mejorar la experiencia de quienes utilizan el espacio.
Texturas y sensaciones
El tacto también forma parte del neurointeriorismo. Incorporar materiales naturales como madera, lino o piedra crea sensaciones acogedoras y auténticas. Las superficies suaves invitan al relax, mientras que los acabados rugosos añaden interés visual y estimulación táctil. Un buen equilibrio de texturas enriquece la experiencia sensorial de cualquier ambiente.
Aplicaciones en distintos espacios
El neurointeriorismo puede aplicarse en hogares, oficinas, comercios y restaurantes. En casa, busca generar bienestar y relajación; en las oficinas, incrementar la creatividad y productividad; y en los negocios, despertar emociones que inviten a entrar, permanecer y regresar. Cada contexto demanda una combinación específica de estímulos sensoriales adaptados a su propósito.
En AMS utilizamos estos principios para diseñar lugares que no sólo se ven bien, sino que se sienten bien. Un espacio creado con neurointeriorismo es un espacio que abraza a sus habitantes y clientes, generando experiencias memorables y positivas.